Se define como el respeto a las ideas, creencias o prácticas de los demás cuando son diferentes o contrarias a las propias.
La tolerancia es la
actitud que una persona tiene respecto a aquello que es diferente de
sus valores.
Es
importante tener en cuenta que la tolerancia no es lo mismo que la
indiferencia. Es decir, no prestarle atención o negar los valores del
prójimo no es una actitud tolerante.
La tolerancia supone el respeto
mutuo y, en su grado máximo, el entendimiento mutuo, aún cuando no se
compartan dichos valores.
La tolerancia es la capacidad de escuchar y aceptar a los demás, comprendiendo el valor de las distintas formas de entender la vida.
De
todas maneras, estas formas de entender el mundo no pueden atentar
contra los derechos de los demás. Si un sujeto tiene valores que
implican conceptos de supremacía racial y busca el exterminio del
prójimo, por ejemplo, no significa que haya que tolerar su postura.
No hay comentarios:
Publicar un comentario