Un cuento sin edad... que está lleno de
mensajes para entender el proceso vital por el que nos
encontramos a nosotros mismos.
Viendo de nuevo este clásico, nos plantemos una serie de cuestiones que os queremos plantear:
¿Os parece que para sentirnos bien, tenemos que encontrar a los que son como nosotros?
¿El objetivo último es buscar y encontrar a los que son iguales que nosotros?
¿No se fomenta así aun más las diferencias entre los grupos?
¿Crees que es un final feliz el del cuento?
¿Nos tenemos que dividir por nuestras semejanzas?
¿El mundo es así?
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