El Gobierno valenciano ha impulsado la campaña "El joguet no té gènere",
cuyo objetivo es hacer una llamada a los adultos y a las empresas para
que no contribuyan a los estereotipos de género en los juguetes
infantiles, y posibilitar "un cambio de mentalidad" en este ámbito.
El
juguete puede ser un punto de partida para que los niños y las niñas
tengan la posibilidad de romper las barreras que perpetúan la
desigualdad, que viene dada por la asignación de roles por género casi desde el momento del nacimiento, a partir de colores y de estereotipos.
Según el último informe del Observatorio español de publicidad sexista,
del año 2003, el 80,5 % de los anuncios de muñecas y el 86,6 % de los
relacionados con imitación de objetos del entorno doméstico iban
dirigidos a niñas, mientras que el 91,6 % de los juguetes de acción y el
87,5 % de los vehículos se destinaban a niños.
El
informe también reflejaba que la actitud de las niñas en esos anuncios
era más pasiva y se les otorgaban atributos como el cariño y la
coquetería, mientras que a los niños se les atribuía el liderazgo o la
fuerza.